viernes, 3 de enero de 2020

* -Con varias sonrisas- Juanita Lara


Cómo no voy a estar feliz si Aldo y Diego descubrieron también el amor de Dios en un cursillo. Aquí junto a varios cursillistas recorriendo Iquique compartiendo la alegría, la fe y la esperanza. Mi mundo sí es "de colores"
La invitación nos llegó de Anita Carrasco y Nano. Fueron muy astutos porque partícipábamos en la catequesis de primera comunión de Diego. Ni siquiera me detuve en pensarlo respondí de inmediato que ¡sí! yo voy altiro!.
Recuerdo la despedida del bus y los hombres con sus pañuelos cantando con mucho humor:"soltero, soltero sin compromisos" después de los abrazos, del recibimiento con fraternidad en la partida.
La primera noche no dormí nada, estaba un tanto nerviosa, tenía una vocación sencilla y de tibieza pero, fui descubriendo poco a poco la emoción de los temas y de los testimonios.
Mi visita al Santísimo fue increíble. ¡Era el Señor!. Caí a sus pies y no podía levantarme, eran sollozos de alegrías. Reconocía que lo tenía en el olvido, botado, me sentía muy alejada. Y me recriminaba porqué no había asistido antes a este encuentro ; los tiempos del Señor no son los nuestros. Quedé eufórica con la Eucaristía, ¡impresionante! nuestro Señor se quedó con nosotros para acompañarnos hasta el fin de los tiempos.
Muy contenta con el Padre Alejandro que nos enseñaba de la vida de Jesús, su Madre y los hermanos. También ha quedado en mis recuerdos la Toñita: se le notaba en la cara su tremendo amor a Dios y lo comunicaba con entusiasmo. 
Hago un resumen esa primera noche quedé preocupada pero desde allí sigo, continúo, persevero. Me asustan los retos de cada momento pero los asumo con seguridad. Es que no estamos solas, tenemos al mejor de los Amigos con nosotros y con Él todo, todo es posible.
"de colores hermanitos" tenemos un nuevo período para ser mejor, servir, amar y ser felices.
abrazos

JUANITA LARA CAMILO

La fe requiere salir, caminar: somos purificados en el camino de la vida, que a menudo es cuesta arriba porque lleva hacia lo alto. (Tweet del Papa, 8 nov. 2019)

No hay comentarios:

Publicar un comentario