me hice unas preguntas participando en los último encuentros de nuestro Mcc Diócesis:
Hay muy pocos participantes, ¿dónde estarán los padrinos entusiastas, los ahijados olvidados, los dirigentes de mi cursillo, los que trabajaban en la cocina, los participantes del grupo de amigos, los que queremos y necesitamos seguir, los buenos para cantar, los que hablan mucho, los calladitos, los alegres los buenos para el chiste, los serios, los muy ocupados, los jubilados?- ¿dónde están que no los vemos?.
porque aquí cada miércoles vamos siendo cada dia menos. a lo sumo los mismos de siempre que lo intentan, y...
se hacen esfuerzos, se avisa a menudo, por aquí, por allá, por más allá.... pero la rifa anda apenas, el bingo no prende, pero nosotros..
tenemos mucho que aprender de todo los sucedido, no es solo de nuestra ciudad sino de todo el mundo, la pandemia llegó para quedarse, estamos todos en la misma, algo debemos aprender para mejor: ser más unidos, más cariñosos,
más pacientes- en la fila, en el tiempo, sacar permisos, hacer mi lista para las compras, intentar salir luego, evitar aglomeraciones,
yo tengo que aprender a descubrir porque sucede todo esto,siempre hay una razón que debo descubrir, aprender de lo nuevo, reinventarme, tengo que cambiar tantas cosas que ayer siempre fueron normales, pero seguimos desesperanzados, divididos en tantas cosas, y todo esto inevitablemente nos une,
veo con verdadero agrado todavía que hay gente maravillosa en nuestro bendito movimiento. estamos de entrenamiento, llevamos un año de ello. ahora nos vemos a menudo, a distancia, sin mascarillas, auténticamente, ello me alegra, ayuda, acompaña, ustedes ciertamente son un aliciente en mis dias de espera, si, sabemos que un día todo esto cambiará y estaremos más conscientes y más alegres,
porque ustedes han hecho posible que yo y mis hermanos siguieramos, no nos alejaramos-como algunos, nos entusiasmáramos-como tantos, nos integráramos-como muchos y que confiaramos en el Señor, siempre.
por todo esto amigos hermanos, familiares les debo dar las gracias, tenemos que seguir invitando, trabajando y orando. Mañana estamos de escuela: invita, participa, colabora,
sigamos pues muy unidos, alegres y más perseverantes. Una invitación a Ultreya! participar, orar, trabajar y soñar.
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