Tengo una amiga muy querida que encuentro en el camino. El saludo y contarnos las novedades de la vida, el tiempo, la familia.
Comparte la novedad que le ocurrió esta semana. Cuenta que sale de compras con su carrito y recorre el mercado Modelo, carnicería, queso y verduras. Revisa su lista y solamente le faltan los huevos.; ya ha gastado más de cincuenta mil pesos pero ya termina por fin.
Allí está el local cerca de el centro del mercado, siempre hay gente en fila y se coloca a continuación. Compra una bandeja de treinta unidades y contenta revisa su nota y ratifica que nada queda pendiente. Busca su carro de compras y ohh sorpresa no se encuentra por ningún lado, revisa, pregunta. Alguien le dice que una señora iba muy rápido con un carro repleto.
Camina, pregunta. El la salida hay carabineros y acude con su problema: "me acaban de robar mi carrito con todas las compras señores"
La miran, tiene apenas una bandeja de huevos y está afligida. La respuesta es sincera: "que lástima señora".
Regresa a casa. Por lo menos no la empujaron ni pegaron.
La plata no importa y me confía: espero que le haya servido a la señora en su casa con su familia. Estoy seguro que ella hoy sin querer "cooperó"
Agrego la conocida frase de un programa radial de aquellos años lejanos: "Señor, danos tu fortaleza!
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