BUEN APRONTE
En estas vacaciones de invierno recibimos la visita de nuestra sobrina del sur con toda su familia, su esposo y tres hijos. Como era el día Domingo les avisamos que nos iríamos a misa de las 10 por si había “algún entusiasmo de acompañarnos”- apenas el resultado desganado fue
“que vaya el niño ya que se está preparando para su primera comunión y tiene que ir”.
Así “obligado” el chico y contentos nosotros, vimos este poco entusiasmo cristiano que acudir al templo de nuestra comunidad a dar gracias por tanto incluso, por el hecho de tenerlos en vacaciones. De a poco y de reojo lo miraba disimuladamente mientras cantábamos y poníamos toda la atención a las hermosas palabras del sacerdote que con entusiasmo nos entregaba la riqueza del salmo 23 :el Señor es mi pastor, nada me ha de faltar…..“en verdes praderas”…(siempre emocionante y cautivante)
De regreso a casa de inmediato se pone a jugar con su hermana mayor quien lo mira de soslayo le pregunta
….¿y…? como te fue?…..
-bien (sin ningún entusiasmo)
-aburrido?------
-hummmm si……
Para que les digo, me piqué para adentro. No quise agregar nada. Solamente sacar cuentas que con una hora a la semana….¡cuándo vamos a interesar a nadie!- y preguntarse ¿cómo entusiasmar, calentar, ………
no cabía hablarle de mi experiencia hermosa de este Cristo vivo que inundó mi vida y la de mi mujer en un hermoso cursillo vivido ya más de cuarenta años, de las múltiples alegrías , historias, sorpresas, y tantas cosas que lo aburrirían de inmediato.
Alli recordaba a tantas personas que sin tener ganas, deseos ni entusiasmo un dia les pasó un algo especial…a algunos los sorprendió en una prueba, a otro lo botó de su caballo. Intentar tan sólo y poco a poco con la manera de ser y vivir mostrar que tenemos algo diferente, especial y hermoso que fue posible tan solo por compartir más de una hora dominical y que nos llenó la vida para siempre.
Algo magullado quedé porque pese a mis esfuerzos y dedicación ni siquiera lo entusiasmé un poquito. Ése día me tocó animar la eucaristía y parece que no entusiasmo a nadie. Paciencia, llegará el momento de tu llamada. No me cabe duda alguna.
CHOCHE
