miércoles, 30 de mayo de 2012

* Un domingo de compras...

Es el día de acompañar a las compras la feria y el supermercado. Domingo, mediodía la “peor hora”, la hora peak o del tumulto en el estacionamiento, en las cajas para pagar, en todo. Todos con “cara de domingo” -de comer “algo rico” pero con un aperitivo grande de... paciencia!. Mientras estamos preparando el listado de las necesidades , me detengo por un momento para agradecer por todo lo que diariamente recibo-regalos diarios por montones y constantes del Señor- muchos tanto que no podría nombrarlas, agrego un pedido “inédito”, Señor, coloca en mi camino a alguien especial, que pueda yo “tocarle en tu nombre” y que sienta tu calidez y humanidad”, -breve, preciso, consiso.

El primero es un varón, anda solo, su mujer con cierta dolencia en la espalda le espera en casa. Que tremendo, hacía años que no le veía, lo encuentro igual aunque se ha reido de mis canas...y Bosnia? Un sentimiento de cariño es la tónica de la conversación: hijos, nietos, esperanzas , problemas y …la vida.

La segunda es simpatiquísima, la veo participando muy entusiasta en mi comunidad cristiana de El Carmen. Es elocuente para reir y conversar y hace la revisión a los miembros de la familia con expresiones de alegría espontánea. Hace tiempo que la estoy invitando a vivir un cursillo, pero aún no se han dado las cosas por el trabajo de su esposo, que labora fuera de la ciudad, pero la esperanza.....sigue invicta!. La dejo con las buenas vibras y de lo bueno que me ha dejado por estos dos encuentros.

Sigo en la vorágine de la muchedumbre y de improviso, el encuentro es con dos mujeres, muy curioso, ambas después de mucho tiempo y de crianza de sus hijos ahora están “en otra”: criando nietos por razones muy imperiosas. Viven una etapa muy preciada y sienten que el Señor les da las fuerzas increíbles que la edad no le otorga. De una de ellas, su esposo enfermito-los años no pasan en vano,- pero ella, déle que suene, siguiendo juntos como siempre, trabajando la casa y apoyando a su enamorado-tan bueno para los chistes. Descubrimos que los nietos vuelven a iluminar sus casas, a sonreir con las otras historias-tienen esperanzas, ternura y son tan expresivas ellas que me tiran para arriba con fuerza y perseverancia. ¡¡Qué modelos!!

Gracias Omar, gracias Jeannette, y gracias a estas especiales mujeres que conpartieron un dia esta novedad: Sonia y Mónica-ustedes, los cuatro-cual más cual menos, me han mostrado claramente el rostro de Jesús, de mi Señor. Me han regalado el cariño, la ternura de un ser humano. Me hacen seguir teniendo confianza en la gente; me han regalado un combo de fe y de esperanza en los niños y en mis semejantes.
Es rico tener un día domingo, en medio de la muchedumbre, un encuentro diferente, me hace bien, me estimula a seguir adelante en este peregrinar del cual compartimos el camino juntos.
Gracias por sus vivencias-confidencias. Por el entusiasmo que me demuestran, por la alegría que enseñan a pesar de muchas cosas, el anhelo es que reciban siempre mayores bendiciones para cada familia-ahora y siempre.
Gracias por tu tremenda bondad al mostrarme a estos hermanos que quiero y estimo, que siempre pueda descubrir en sus vidas que Tu estás siempre presente y que en la mía nunca me faltes, porque te necesito siempre Patrón. que pueda también mostrarte siempre donde vaya. GRACIAS!!

.Caqui
!de colores!”


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