Demos gracias a Dios por todo este tiempo: de lluvia que tanto esperábamos, de encuentros cara a cara que recordábamos a través de una pantalla, de la gente que nos envió un mensaje de alegría, otra de esperanza y también de oración. Por todos los que nos hablaron y nos mostraron a Dios, en su caras, acciones y sonrisas. Por los que nos contaron su historia, nos confiaron su película personal, nos invitaron a pensar, orar, confiar y alegrarnos juntos, a seguir tener que esperar.
Por sentir que en tantas circuntancias -miles!-apreciamos que nuestras solicitudes eran escuchadas desde el cielo y nos maravillamos una vez más. Que siempre mantuvimos la capacidad de asombro, al descubrir hermanos, esfuerzos, milagros de cada dia y la alegría de seguir intentando el camino del Señor.
Viene la primavera, luz, sol, flores. Hoy es un buen dia para alegrarse por tí misma y por todos nosotros. Por nuestros cercanos más entusiastas, que tiran parriba y que luchan contra la corriente.
Hoy, ahora es el momento para dar las gracias....
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