La Isla de Chiloé y sus encantos- Febrero 2012


Viaje a la Isla de Chiloé. Bus anual desde Requínoa con la organización de Juan Lobos Zúñiga.
El Miércoles 15 de Febrero 2012 partió el Bus desde la Estación de Requinoa a las 22 horas aproximado.LLegada a Valdivia para recorrer sitios de interés hasta el fuerte Niebla. Se llega el Jueves 16 a la localidad base de Dalcahue- muy cerca de Castro- que tiene la particularidad de quedar más central en la isla y poder viajar a los alrededores.
Viernes 17 Curaco de Vélez, Achao.Fiestas costumbrista, comidas y asados, cantos y competencias.
Sábado 18 Quellón- kilómetro cero de la Panamericana.Fotos
Domingo 19 Feria costumbrista de Castro- Muestra de labores y productos de todo tipo. Platos típicos.Curanto en ollo
Lunes 20-Castro, Queilén, Chonchi- Licor de oro, ajos.Fotos y compras.El amigo secreto, un buen momento para compartir con alguien del grupo, conocerse y hacer amistad..
Martes 21-Regreso 09 horas-deteniéndose en Ancud, Puerto Montt,compras de queso, salmón, miel de ulmo, artesanías, recuerdos-Almuerzo en los palafitos remozados mientras la lluvia nos refresca en pleno verano.Después paseo a Puerto Varas-para despedirse a las 23 horas-
Miércoles 22- Llegada a Chillán al desayuno. Compras de longanizas y otros, pasada a las tortas de Curicó.
Llegada a Requínoa a las 14 horas-los familiares esperando los regalos.

Una aventura hermosa.La maravilla de descubrir a Dios en cada paisaje.Para aprovechar el viaje es clave amoldarse a los horarios y ser puntual. Curiosamente no vimos nada de televisión, pero sí horas de conversación,de verde, de agua, de embarcaciones multicolores- te alimenta el espíritu y te da un refresco al alma.Más de una vez nos sentimos como niños, con chistes, situaciones y conversaciones, hasta jugamos al carioca varias noches.
Vivimos los espectaculares espejos de agua en cada lugar, los cisnes de cuello negro, las embarcaciones grandes, chicas, todo distinto a donde vivimos, paisajes de muchos colores.La maravilla de la lluvia sureña refrescando y animándonos cuando en el centro del país ya se habla de sequía. La frescura del clima, lo verde, lo nuevo, lo simple...
Viajar a la mágica Isla de Chiloé es descubrir siempre algo nuevo y hermoso que vale la pena volver.

Sólo agregar las buenas vibras, la talla oportuna, el gusto de compartir con un grupo unido, homogéneo,es verdaderamente exitante la gracia de nunca perder la capacidad de asombro: nuestro país es muy bello, gusto a poco, la revancha en una ocasión próxima....¿verdad?.

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