Jesús nos invita a ser hombres y mujeres constantes y perseverantes en la oración.
La oración nos permite fortalecer nuestra vida interior, favorecerá nuestra Piedad y se verá reflejada en nuestra Acción Cristiana con manifestaciones de amor y servicio en nuestras comunidades.
La oración es un diálogo de amor con nuestro Padre Celestial. Un diálogo de amor con nuestro Padre generoso que nos regala al Espíritu Santo como guía de nuestra vida.
《LA LLAVE DE NUESTRA VIDA ES LA ORACIÓN, PORQUE EL QUE ORA, AMA, Y QUIEN AMA, ORA》
SEÑOR JESÚS
Gracias por el descanso que nos permites y por este nuevo amanecer que nos invita a seguirte y servirte con mayor entrega. Gracias por tu Palabra, que renueva nuestro corazón... por enseñarnos que la vida no depende de la abundancia de los bienes materiales. Gracias también por enseñarnos desenmascarar la codicia que nos puede dominar, haciéndonos capaces de abandonar lo esencial por lo superficial y cerrarnos la puerta del Reino. Danos sabiduría de reconocer que la vida es corta y que debemos gastarla sólo para Ti, y para la salvación de los que nos rodean.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.
AMEN.
BUEN DÍA.
FELIZ Y BENDECIDO LUNES.
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