Se nos vino marzo... ÁNIMO!

 


 

 "Que se note que somos de colores".

El Secretariado Diocesano del Mcc Chile nos envió las 21 tareas que realizar en este nuevo período. Son tres años y 21 tareas que llevar a cabo con unidad, entrega, participación, alegría; también con Acción, Estudio y mucha Oración.

Es como "subir a Jerusalén", todo se pone cuesta arriba, es que los problemas, dificultades existen siempre. Pero Señor tu eres nuestro refugio y fortaleza. Somos, todos un ilusionado grupo de servidores, también soñadores y convencidos que es un trabajo para el Señor y vale la pena intentarlo. 

"Se nos vino marzo", sonó la campana y llegó el profesor. Es el Señor y estás TÚ SEÑOR- PRIMERO.

Y ¿CÓMO HACER PARTICIPAR A LOS HERMANOS CURSILLISTAS? hay antiguos o nuevos, alejados, apenados, tristes, sin ganas, hay entonces que compartirles esta novedad.

Invitándolos, repartiendo el trabajo, que se sientan unidos en un mismo sentir, una misma tarea, aportando lo que el Señor me prestó: ilusión, trabajo, talentos, sueños... Que nos llene la cabeza de ideas y el corazón de fuego.

Siempre problemas habrá: el movimiento de cursillos nace en momentos muy difíciles, la guerra civil española, el mundo estaba de espaldas a Dios (y ahora como estamos por casa?) recordamos que en Rancagua no estaba autorizado el Mcc en la Diócesis. Entonces nos invitaron a Santiago. Allí empezamos tímidamente pero con mucho entusiasmo y oración hasta que conseguimos la autorización eclesiástica.

Recién, tuvimos nuestro propio desastre de Rancagua,  le pusieron el nombre de "la cofradía". Es verdad, la pasamos muy mal. Siempre hay "alguien" interesado en que fracasen los entusiastas del Señor y todo vale para sembrar dudas, miedos, y que no vale la pena trabajar....¿para qué tantos desvelos?. Pero seguimos al Señor y no a los hombres que pueden olvidar, equivocarse y alejarse.

Hoy queremos continuar adelante pero vamos a precisar de los Padrinos y sus ahijados de los últimos ocho cursillos- habrá que revisar la historia- ver los dirigentes, los cursillistas, las comunidades; los grupos de amistad serán claves, juntos a los dirigentes, las vocalías, la "vitamina R" podremos reconquistar a los olvidados, abrazar a los perdidos, contactar al vecino, amigo ahijado. Entre todos haremos posible el reto, trabajaremos la unidad y no nos despegaremos de la mano amorosa y tierna del Señor. Problemas siempre habrá pero no estamos solos.

¡DE COLORES HERMANOS!  

 

 

Comentarios