domingo, 9 de julio de 2017

-¿Para qué me sirvió vivir un cursillo....?

Un Cursillo.......Me sirvió para entender y  rezar el rosario.
 En el tiempo de trabajo y familia, dejamos de lado una sana y hermosa costumbre familiar que indicaba el Padre Peyton: “familia que reza unida permanece unida”. Podremos decir mil razones para no hacerlo : “no tenemos tiempo, es muy monótono, es muy largo, no es importante, preferible una buena película y que se yo”.
Mis inicios en esta santa devoción se iniciaron cuando pequeño y acudíamos a visitar a la abuelita María en Bulnes. Allí cada día después del almuerzo y antes de las onces nos reuníamos a rezarlo juntos en familia. Inolvidables eran las novenas de San Sebastíán que se celebraba en la vecina localidad de Yumbel y donde acudía mucha gente con gran fervor.
Se desarrolló durante mucho tiempo juventud, niñez pero la vida cambia, al trabajar hay muchas otras preocupaciones y no hay como dedicar a tan especial costumbre. Me ví “obligado” a reactivarla al postular a nuestra casa de familia, y en cursillos reafirmé- como tantos-  la tremenda eficacia de la oración  –en el proceso habían algunos problemas de alcance del préstamo, no había caso, nos faltaba platita para completar la compra así empezamos a pedirle a Nuestra Madre Santísima que se solucionaran los escollos del camino que parecían imposibles.
Cada día entonces al viajar a la oficina empezamos a rezar  y a la vuelta completaba, todo se fue solucionando paso a paso era de verdad una maravilla como para no creerlo y así hasta que nos fuimos a vivir a nuestra casita con un pedacito de sitio para las flores de Carmen y los juegos de nuestros dos hijos. Podría haber llegado hasta allí con la devoción,  solamente para cumplir que se había realizado el sueño de la casa pero, la verdad es que continué con ganas y entusiasmo más aún al descubrir las enormes gracias que  la oración permanente te produce: paz, tranquilidad, esperanza ….alegría. muchas cosas más podría contarles y de ellas muchas aún me asombran ya que muchas cosas he aprendido en este camino de oración. La Madre Santísima es siempre increíble. Si no has tenido ocación y suerte de apreciarla, te invito a tomar tu rosario y orar.   
Con mucho cariño

ENRIQUE - Mcc Rancagua Cursillo N°28 //////////////////--

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