-Vivía la religión a lo "Frank Sinatra"* 110





Trabajé muchos años en la empresa Minera El Teniente. Al retirarme decidí comprar un vehículo y trabajarlo como taxi, así conformamos una línea de transporte y una buena amistad con mis colegas. El presidente de la línea era Mario y yo el tesorero, conformamos- no porque yo lo diga, un buen equipo. Un buen dia, como nos ubicábamos como católicos, Mario y Mónica- nos invitan a tomar onces con  Georgina y nos hacen la propuesta especial de descubrir algo nuevo y bello. Estaba consciente que vivía la religión a mi manera a lo “Frank Sinatra” así dijimos que bueno, vamos a este retiro, con la convicción que siempre hay algo bueno que aprender.
Gustavo fue el rector en mi cursillo y de verdad me gustó conocer mejor al Señor, por ende una mejor vida y mejores amigos.
Entusiastas y alegres conformamos un grupo de amistad  en este “cuarto día: “Jonás” y estaban mis padrinos y mi hermano el rector  Gustavo con su mujer Alicia, Mario y Mónica, Nano y Nany y nosotros con Georgina.
El grupo es elemental, conocernos y querernos, crecer, aprender, ser mejor. Me ayudó mucho, rezamos más.
Hace 4 años que mi compañera está enferma, postrada con esa enfermedad del alemán y me dedico a cuidarla, amarla en silencio, rezar. En Diciembre cumpliremos Dios mediante 65 años de matrimonio, solo Dios sabe lograremos estar juntos a lo setenta, a mi ¡me gustaría tanto!
Me dedico entero a mi iglesia doméstica y añoro los encuentros, escuelas y ultreyas; cuando uno no puede asistir y vivirlas, las echa mucho de menos.
No reclamo nada: la fe está intacta. Es lo que me tocó no más- medito- y agrego convencido “el Señor sabrá, yo no discuto nunca, acepto su santa voluntad”. Cursillos me ha dado la opción de entender que todo esto tiene un significado
A la entrada de casa tenemos nuestra biblia abierta, abrazando a quien llega, digo siempre que  está como mi corazón y mi vida: aquí esta TODO.
Lo único que echo de menos ahora, es mi grupo, esos encuentros eran de riqueza y crecimiento; siento que es una gran necesidad, compañía  y fuerza el tenerlo, trabajarlo y vivirlos.
Recomiendo a todo el mundo vivir su cursillo, aprender del amigo verdadero que nunca falla y que te llena la vida para siempre.
Nosotros lo hicimos y vivimos contentos y agradecidos por este hermoso regalo.
De vez en cuando recen por mi viejita a quien sigo amando cada dia mucho más.

“de colores”
DOMINGO

Comentarios

  1. Inolvidable mi hermano Domingo. Los visitaba y conversábamos un buen tiempo. Ambos viven su QUINTO DIA- el verdadero, el definitivo. En un nuevo aniversario de personas, vivencias- quise -al acercarnos a los diez años de peregrinaje recordar a ambos; protagonistas de una increíble historia de amor, unión y bondad. Descanse en paz hermanitos colorinos! Caqui en el dos mil veintidós.........con gratitud!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario