Una
de las virtudes de haber vivido un cursillo es contar que
nos ayudó a descubrir las amistades verdaderas y por supuesto al
mejor de los amigos quien nunca falla.
Era
el año 1999 teníamos un negocio de variados rubros y “el que
tenga tienda....que la atienda” como dice la frase-no teníamos
tiempo para nada más.
No
se preocupen, decían los amigos quienes venían a invitarnos a esta
experiencia plena de todos los colores:” somos gentes sencillas y
esto es un verdadero regalo”. Tanta insistencia me dejó pensando:
pero el negocio, las ventas, Rosita nuestra hija casi señorita, de
alguna manera, no sé como pero todos nos apoyaron de una u otra
forma para vivir cursillo. Es que Dios puso esto para que nos
aferremos más a El, para que nos apoyemos, nos juntemos y sigamos
conociéndolo cada dia mas.,
Una
palabra para definirlo: muy hermoso!
Si,
de verdad, lo he conocido mucho más. Solo se ama lo que se conoce y
en lo que se ama...se confía- conocerlo en profundidad nos hace
plenamente felices, satisfechos..haber dejado nuestros quehaceres del
mundo y ahora a evangelizar, dar a conocer la palabra a los amigos,
familiares y enemigos-si lo hubiera.
Tengo
ahora que alzar la voz! Dios existe! Alfa y omega, sin principio ni
fin.
Felices
los humanos, nosotros, que tememos a Dios.
Confiados,
entregados, entusiastas, seguros al testimoniar que al terminar esta
vida que espere ver al Señor! La maravilla de contemplarte
eternamente ¡Dios mio!
Te
pido: Ilumíname para llegar con las manos llenas de obras a la
eternidad y hacer el bien sin mirar a quien.
En
la trayectoria siempre hacer el bien ya que estamos de paso en este
mundo terrenal para mañana gozar solo de la presencia de Dios.
Todo
eso por vivir un cursillo si que valió la pena.
¿y....?
le pregunto a Milton a su regreso de sus tres dias¿cómo fue?
Bueno
por el sigilo no te puedo decir nada pero espera y verás.
Si
es así....yo lo quiero vivir!
hay
que darle tiempo a las cosas de Dios. No todo tiene que ser el
negocio y el trabajo. He descubierto la necesidad del crecimiento
espiritual- ello me aclaró muy bien esta experiencia- también que
el trípode es vital y necesario, que el grupo- a pesar de nosotros
mismos, todos distintos pero interesados de remar juntos es vital..
Me
dí cuenta también que todos tenemos las mismas necesidades.
De
verdad hermanos queridos, tenemos un Padre justo, magnánimo, es
también el mejor amigo que puedas encontrar, quien nunca- a pesar de
nuestras fallas-nunca olvida a sus hijos
valorando
siempre la vida debemos intentar siempre de evangelizar, de entregar
algo de lo mucho recibido.
Cursillo
no tiene medidas ni fronteras, gracias a Dios. Cada dia descubrimos y
apreciamos nuevas cosas y maravillas que nos regala: paz, amor,
alegría y esperanzas.
Un
abrazo a todos los cursillistas
en
la fraternidad “de colores”
Febrero
2014
TERE,
LATACUNGA, COTOPAXI- ECUADOR.
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