En dos encuentros y jornadas nacionales tuvimos la suerte de abrazarnos, rezar, cantar y darnos ánimo para seguir siempre.
Gracias a todos los hermamos que con ánimo y entrega compartimos estos dos importantes eventos nacionales.ASAMBLEA Y ULTREYA
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡de colores !!!!!!!!
¡Gracias Señor, gracias MCC, gracias CHILE!
Gracias a todos los hermamos que con ánimo y entrega compartimos estos dos importantes eventos nacionales.ASAMBLEA Y ULTREYA
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡de colores !!!!!!!!
¡Gracias Señor, gracias MCC, gracias CHILE!
Hace
tan solo una semana vivíamos entusiasmados nuestra hermosa Asamblea
Nacional MCC CHILE en Panguipulli Diócesis de Villarrica y la
Ultreya Nacional en Temuco por los 50 años del movimiento en Chile.
Uno
se sorprende una vez más por la gran convocatoria nacional que une
dirigentes, voluntades y hermanos trabajando con ilusión, entrega y
espíritu de caridad. Recordaba que a inicios del año se preparaban
estas celebraciones. Algo habría que hacer para fecha tan importante
y pensando en Rancagua, los cursillistas, el no disponer de una sede
propia ni casa ejercicios, más otras dificultades; quisimos hacer
historia-una vez más, guardando algunas vivencias de nuestros
hermanos. Les pedimos a cincuenta personas que nos contaran de aquel
momento de su llamada personal, de su experiencia y del momento en
que su vida hizo el click de la conversión. Me di cuenta que somos
malos para escribir al ver la escuálida y mínima respuesta así que
empezamos a anotarlas in situ en cada oportunidad y con cariño y
dedicación.
Al
salir desde Rancagua a nuestra Asamblea Panguipilli el resultado fueron solamente 45
historias. Lástima, no llegamos a la meta propuesta para
compartirlas con nuestros hermanos. Así que en la Asamblea en
Informe de gestión actividades 2011-2013 se nos ocurrió hablar del
“sitio de Rancagua” con los datos y guarismos del periodo
descrito. Allí descubrí que el “sitio existía en el éter, en
forma de blog” y que aspiraba a guardar parte de nuestras vidas y
que siempre estaba disponible. Y la otra sorpresa que las 45
historias que juntamos recordaban los cuarenta y cinco vivencias de
los años de los Cursillos en Rancagua- ni más ni menos- era
entonces doble significado.
Son
las hermosas sorpresas y “guiños” que recibimos continuamente de
nuestro Buen Padre y a menudo no nos damos cuenta; por éso
aprovechar de agradecer a tantos por tanto. Invitar a narrar la
propia experiencia y abrazar-otra vez y ahora a la distancia, a todos
los entusiastas, enamorados por compartir este peregrinar juntos a
todos nuestros hermanos del MCC Chile.
En
la “fraternidad ¡de colores!”
ENRIQUE
., 0
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